EDUCACIÓN HOSPITALARIA
“Cada niño tiene características, intereses, capacidades y necesidades
que le son propias; si el derecho a la educación significa algo, se deben
diseñar los sistemas educativos y desarrollar los programas de modo que tengan
en cuenta toda la gama de esas diferentes características y necesidades”
(UNESCO, Marco de Acción de la Conferencia Mundial sobre Necesidades Educativas
Especiales: Acceso y Calidad, Salamanca 1994).
Las aulas hospitalarias.
Las aulas hospitalarias y por
consiguiente la educación en el medio hospitalario es uno de los campos
educativos de los que se posee poca información, además, la bibliografía
existente es muy escasa. No es raro conocer a personas que se sorprenden de la
existencia de maestros y maestras en hospitales y muchos más se preguntan en
qué consiste la tarea diaria y se plantean dudas sobre cómo se atenderá a los
niños/as en situación especial como es la de estar enfermo, ingresado en un
centro hospitalario. A lo largo del curso escolar, son muchos los niños y niñas
que por una causa u otra, sufren diferentes trastornos físicos, enfermedades,
traumatismos, operaciones, etc., por lo que deben ser ingresados en el
hospital. Estos periodos de hospitalización les impiden un desarrollo normal
del curso escolar llegando a provocar en ocasiones graves retrasos académicos.
Actualmente se pueden corregir estos retrasos gracias a las unidades de apoyo
educativo en centros hospitalarios o apoyo educativo en casa, cuando el niño ha
dejado el hospital, pero no se considera adecuado que asista a un centro
educativo. De esta forma, se pretende atender y satisfacer el derecho que todo
niño tiene que recibir una educación general, incluso en los periodos de
enfermedad.
¿Porqué Aulas Hospitalarias?
Las Aulas Hospitalarias surgen
ante la necesidad de resolver los problemas de escolaridad de los niños que se
encontraban ingresados durante un periodo de tiempo, más o menos largo, y que
por ello no podían asistir al colegio (Guillén y Mejía, 2002).
El tipo de actuaciones educativas
en los centros hospitalarios dependerá de los objetivos planteados que tendrán
un marcado carácter educativo-formativo, entendidos estos como aquel conjunto
de pautas encaminadas, no solo a la consecución de metas puramente académicas de
acuerdo a la edad, sino que pretendan también, en sentido amplio, educar al
sujeto para la enfermedad. El objetivo general es proporcionar una atención
educativa-formativa y humana de los niños ingresados en el centro hospitalario.
Los objetivos específicos que
propone el MEC junto con la Subdirección General de Educación Compensatoria que
dictaminó en su día en el programa de aulas hospitalarias son:
o
Continuar, siempre que sea posible y la salud lo
permita con el currículo establecido con carácter general en el nivel
correspondiente a cada niño hospitalizado.
o
Facilitar la integración del niño en su nivel de
escolarización a través del proceso educativo llevado a cabo en el hospital.
o
Paliar el retraso escolar mediante la
continuidad de las actividades escolares.
o
Conseguir que el niño sea capaz de valorar las
dimensiones reales de su enfermedad.
o
Ofrecer un carácter positivo y un contenido
formativo a los tiempos libres y de ocio en los centros hospitalarios
o
Diseñar y desarrollar actividades de carácter
formal e informal para mejorar su estado en el aspecto psico-afectivo.
o
Estimular la participación de otras entidades en
la atención a niños hospitalizados.
Los objetivos pedagógicos con los
que se pretende evitar la marginación del proceso educativo, y posibilitar así
su incorporación a su vida escolar normal, una vez superada la enfermedad son:
o Elaborar
programas flexibles y sobre todo individualizados, en los que el punto de partida
sean los intereses, expectativas y nivel de competencia curricular que presenta
cada niño.
o Establecer
las medidas necesarias para que el niño pierda lo menos posible, el contacto
con sus compañeros, tutor, etc. del centro de origen.
o Procurar
mantener viva la inquietud por aprender y ejercitar el hábito de trabajo.
o Favorecer la ocupación constructiva del tiempo
libre, mediante actividades estructuradas que contribuyan al desarrollo
integral del niño.
o Motivarles constantemente para que establezcan
relaciones positivas con el medio desconocido y hostil en el que se encuentran.
o Organizar actividades terapéuticas y
específicas en casos concretos.
Los objetivos
psicológicos también tienen un papel importante ya que a través de estos se
pretende conseguir la mejor adaptación de los niños y niñas al medio nuevo, de
tal forma que comprendan que les está sucediendo y por qué. Para que esto sea
posible tenemos que:
o
Conseguir disminuir las vivencias negativas, de
angustia y ansiedad que el niño/a experimenta en su proceso de hospitalización.
o
Resolver
con la información adecuada y contrastada y respondiendo a las inquietudes e
intereses del niño/a aquellas dudas que se puedan plantear acerca de su
patología.
Por otra parte, los objetivos sociales con los que se
pretende crear un ambiente más cercano a su vida diaria, para ello, es
importante:
o
Crear un ambiente de humanización en el
hospital, basado en relaciones de confianza y seguridad.
o
Crear y dar origen a distintas situaciones de
relación, tanto en el aula, como en planta, servicios, etc. que favorezcan las
relaciones interpersonales entre los distintos niños ingresados en el centro
hospitalario.
Los docentes en las aulas hospitalarias.
El papel y la formación de los
maestros/as va a venir marcado por el ámbito donde se desarrollan sus actuaciones
educativas, así como por las características de la población a la que van
destinadas.
Básicamente, el maestro en los centros
hospitalarios se puede definir como aquel en el que se interrelacionan las
siguientes funciones Educativas:
·
Compensadora: Mediante el desarrollo de acciones
de carácter compensatorio con relación a la especial situación de la vida del
niño/a hospitalizado.
·
Preventiva: Procurando paliar el retraso escolar
provocado por la interrupción temporal del currículo.
·
Terapéutica: Esforzándose en combatir el
síndrome hospitalario y desviando la preocupación en torno a las enfermedades
hacia actividades escolares.
·
Integradora: Fomentando un ambiente relajado,
donde impere la buena convivencia, al margen de su procedencia, enfermedad,
edad, etc.
·
De coordinación: La coordinación se realiza a
través de dos niveles:
1.
La coordinación interna, se lleva a cabo entre
los maestros/as que atienden a los niños/as ingresados en un mismo centro
hospitalario; con el personal sanitario y con la familia, sobre todo con los
padres y madres.
2.
La coordinación externa: Se refiere a las
relaciones que los maestros deben establecer de modo permanente con la
inspección de educación, con los profesores de otras Aulas Hospitalarias, y con
los tutores de los centros de origen.
Ubicación de las aulas.
Las Aulas donde son atendidos los
niños que ingresan en los Hospitales, están ubicadas en sus respectivas plantas
de Pediatría. Son salas que, aunque insertas en ese contexto peculiar, tienen
su identidad de clase como tal, representando un espacio alegre y luminoso. La
decoración y el ambiente es adecuado al gusto infantil aunque el aula también
disponga de elementos comunes a toda clase normal: pizarra, corchos,
exposiciones, armarios, material lúdico-educativo, biblioteca, ordenador, vídeo
etc. El acceso tiende a ser fácil y cómodo, permitiendo configurar la atención
médica y la pedagógica, así como la asistencia de alumnos con aparatos y sillas
especiales e, incluso, a veces, encamados
.
Las aulas hospitalarias son un
factor esencial para el desarrollo educativo, formativo y afectivo de una serie
de niños/as que debido a una enfermedad pasan un tiempo, más o menos,
prolongado, de su vida en un hospital, y por lo tanto, lejos de su colegio y de
su ambiente familiar y social. En esta labor, no estamos solo los maestros y
las maestras, un gran número de padres, fundaciones, médicos y personal
sanitario están dispuestos a dar lo mejor de cada uno de ellos para que estos
alumnos/as sientan lo menos posible la ausencia de su ambiente.
Además, debo destacar una vez más
la importancia de la Educación ya que es el instrumento básico que hace posible
la construcción de la personalidad, de las capacidades además de ser, un medio
para transmitir valores y una herramienta eficaz para romper el círculo de la
desigualdad, la exclusión, el riesgo etc.
Gracias por leerme!!
El internamiento prolongado de los niños y niñas en edad escolar no sólo ocasiona la interrupción del ritmo de su escolarización sino que influye en su desarrollo emocional, afectándole en sus relaciones psico-sociales y psico-afectivas. La hospitalización es siempre un hecho traumático y agresivo que produce en el escolar un alto grado de inseguridad.
ResponderEliminarDesde mi punto de vista, el juego ayuda directamente al desarrollo cognitivo del niño, proporcionándole un equilibrio imprescindible para los aprendizajes y las bases para una educación armónica y completa. Ayuda al niño en la adquisición de habilidades cada vez más difíciles y fija hábitos anteriores. Contribuye a la exploración y descubrimiento de su propio cuerpo, de los otros y de los objetos que lo rodean. Facilita el proceso de socialización, potencia el desarrollo infantil, estimulando su espontaneidad, imaginación, creatividad, observación... Ayuda a regular las tensiones. Posibilita la estructuración del lenguaje y del pensamiento, estimula la observación, atención, simbolización...
El juego es causante directo de:
- Desarrollo sensorial: El niño comienza a conocer el mundo a través de los sentidos y percepciones. El desarrollo sensorial tiene lugar a través de juegos sensorio-motrices: Coger, palpar, morder, escuchar...
- Desarrollo psicomotor: Tanto la motricidad gruesa (coordinación y control global de movimientos del cuerpo, equilibrio...), como de motricidad fina (precisión, habilidad manual, coordinación óculo-manual).
- Desarrollo cognitivo: Conciencia de causa-efecto, organización espacio-temporal, inicio de conceptos pre-matemáticos, expresión y comunicación, atención, memoria, imaginación, creatividad...
- Desarrollo afectivo: Expresión espontánea de su personalidad, descarga de tensiones, favorecedor da autonomía, emoción, alegría...
- Desarrollo social: Interpretación de normas sociales, sometimiento de los propios intereses a la voluntad general...
El juego es un auténtico aprendizaje para la conciencia social. La vida es un permanente aprendizaje y el desarrollo humano no puede ser entendido sin él.
Hola Helena, en mi opinión me parece que las aulas hospitalarias ayudan a normalizar un poco la situación de estos niños, creo que les hace sentirse más "normales" y les ayuda a olvidarse un poco de que están en esa situación, que aunque a veces no nos demos cuenta los niños se enteran de todo.
ResponderEliminarUn beso!
Hola Helena,
ResponderEliminarMe parece interesante que la educación hospitalaria se imparta en todos los hospitales, porque es importante, que esos niños reciban una educación y no pierdan el ritmo.
Ya que esto les ayuda a estar más entretenidos y llevarlo lo mejor posible.
Es un tema muy importante, creo que son muy importantes tanto para el desarrollo de los niños, como para intentar darles una normalidad, y un punto de distracción a la hora de tener que estar un largo periodo de tiempo ingresados en un hospital.
ResponderEliminarBuenos días Helena,
ResponderEliminarMe parece un tema muy interesante, con tu post has ampliado mis escasos conocimientos sobre el tema, muchas gracias.
Lo único que quería comentar es, que es de vital importancia que estos niños tan necesitados tengan una educación normal. Suelen sentirse extraídos de la sociedad y entre todos debemos evitar eso.
Un fuerte abrazo.
Hola. Que tema tan interesante, pero tan triste a la vez. Me parece fundamental que existen estas aulas en los hospitales, que sería de esos niños que está ingresados la mayor parte de la etapa escolar sin poder recibir ningún tipo de educación, conocimientos, etc... perderían y se atrasarían en sus cursos, bastante pesadilla es para ellos estar ahí encerrados, separados de sus amigos del colegio, sus profesores, sus familiares, por lo menos que tengan algo lo mas normalizado posible. También tengo que decir que personalmente yo no estaría preparada para llevar un aula hospitalaria, no se si podría soportar tanto sufrimiento en ángeles tan pequeños e inocentes, me parte el alma solo de verlos, para mi creo, que no lo sé, no sería mi mejor experiencia.
ResponderEliminarUn saludo
Me parece de gran ayuda tu post, hoy en día no tenemos tanta información y no todos conocemos de qué forma se hace, pero gracias a tu post he podido ampliar mi conocimiento sobre el tema y lo veo algo fundamental, todos queremos la misma educación, y gracias a las escuelas hospitalarias podemos tener todos la misma educación y aprender creciendo de la misma forma.
ResponderEliminarHola,
ResponderEliminarMe parece que tu post trata un tema interesante e importante para ayudar a estos niños que por su enfermedad no pueden acudir al colegio, y así continuar su aprendizaje para que cuando vuelvan a incorporarse en su día a da puedan llevar un ritmo común al de su compañero.
Un saludo.