Buenas prácticas de actividades extraescolares en infantil

Las buenas prácticas de las actividades extraescolares en infantil.

El concepto actividad extraescolar se utiliza para referirse a todo aquello que se realiza fuera del entorno escolar pero tiene relación con la educación. Al mismo tiempo cuando nos referimos al termino actividad extraescolar nos podemos estar refiriendo a actividades programadas por la institución educativa (excursiones, exposiciones,…) realizadas fuera del horario escolar e incluso fuera del centro educativo, pero sirve para la enseñanza-aprendizaje, de una forma más dinámica rompiendo con el concepto clásico de educación. Estas no deben de ser una obligación ya que de esa manera el niño podría llegar a odiarlas. Ellos también necesitan tiempo libre para estar en familia, con sus padres, hermanos, o para jugar o no hacer nada.
 En esta etapa los niños tienen gran capacidad en el desarrollo de destrezas y aprendizajes: mediante la repetición y la selección de conocimiento para el futuro desarrollo cognitivo. En este momento los padres asumen un papel importante ya que tienen que ayudar a sus hijos a la hora de elegir estas actividades al mismo tiempo que no pueden ser impuestas como hemos dicho antes, con ellas adquirirán buenas habilidades, manejo de instrumentos, deportes,…
A edades tempranas la selección de las actividades extraescolares están en manos de los padres.
Según la mayoría de los expertos las actividades extraescolares tienen grandes beneficios para los pequeños ya que favorecen  su desarrollo personal y  sus relaciones diarias con sus iguales. El desarrollo de estas actividades  tienen relación con una mejora del nivel educativo y el rendimiento académico, y una mayor madurez social y personal. Además de todo esto le ayuda a organizar y saber racionar su tiempo de ocio y de estudio esto a su vez ayuda a evitar comportamientos poco deseados.
Sin embargo, es muy importante contar con la opinión del menor a la hora de seleccionar el tipo de actividades que va a desarrollar, porque el niño puede verlas como una imposición y terminar aborreciéndolas. Aunque el padre hubiese querido ser una estrella de fútbol, es posible que su hijo se incline más por el baloncesto o por el ballet clásico, por lo que no debe considerar que lo mejor es darle la oportunidad (que no tuvo él) de llegar a ser un gran campeón, incluyéndole en el equipo de fútbol infantil del colegio o del barrio. Por el contrario, lo mejor es hablar con el niño y proponerle distintas actividades, tanto deportivas como culturales y de ocio, para que él señale las que más le interesan.
Se debe de introducir a los niños en diferentes ámbitos de nuestra cultura o de otras de forma novedosa, sistemática, precisa, ordenada y organizada en el tiempo para que el cerebro lo vaya procesando haciendo al niño capaz de aprender, mantener y utilizar esa información en su día a día, ya sea a la hora de relacionarse o en su vida académica.

En la actualidad la oferta de extraescolares es muy variada. En la mayoría de colegios de nuestro país se ofrecen este tipo de actividades fuera de horario lectivo. A estas actividades hay que añadirles que en diferentes ocasiones podemos acudir a polideportivos en caso de que la actividad esté relacionada con el deporte, centros dedicados a la enseñanza de idiomas, música, informática u otros muchos sitios que nos facilitan el desarrollo de estas actividades. Para los niños más nerviosos es aconsejable hacer actividades que les obliguen a dominarse.
Como es sabido no todos los niños tienen el mismo carácter, ni los mismos gustos. En caso de que el niño sufra algún problema o dificultad las extraescolares pueden ayudarles a superarlos. Por ejemplo en caso de que un niño tenga problemas a la hora de relacionarse, realizar actividades en grupo puede ser de gran ayuda.

Antes de apuntar a un niño a una extraescolar es conveniente que: sea motivado por los padres y la actividad sea de su agrado no una impuesta por ellos, también se debe tener constancia de las habilidades del pequeño ya que si no está dentro de ellas puede hacer que su autoestima decaiga y se infravalore y por último no se le debe de apuntar a más de una actividad ya que aún son edades tempranas y pueden acabar muy cansados y saturados a lo largo de la semana.
En esta etapa que estamos desarrollando estas actividades no deberían de llevar consigo normas, deberían de ser actividades libres que permitan al niño relajarse después de la escuela.
 En la etapa infantil las extraescolares tienen grandes beneficios, ayuda al desarrollo del niño en diferentes aspectos. En el caso de estar relacionado con el deporte su práctica ayuda al desarrollo de la coordinación, la psicomotricidad, la agilidad y la flexibilidad al mismo tiempo que ayudan al bienestar emocional y físico; previniendo también grandes trastornos como la obesidad o enfermedades de gran importancia como la diabetes. Todo lo relacionado con el deporte es beneficioso para el niño ya que le ayuda a canalizar su energía y relajarse. Por otro lado pueden estar relacionadas con lo académico, estas sirven para asentar los conocimientos adquiridos en horario escolar o para adquirir conocimientos nuevos que en el centro del niño no se imparten. Lo más común es que acudan a clases de idiomas, para que mejoren los que aprenden en el colegio o para aprender otro nuevo ya que le será de gran ayuda en el futuro. También con gran frecuencia suelen ir a clases de informática ya que en la actualidad está muy solicitada, de esta manera se van familiarizando con la tecnología. Por ultimo las actividades pueden ser de nivel cultural relacionadas con la música, la pintura y el teatro, estas se asocian con el ocio y son muy recomendadas para el desarrollo de la imaginación y la creatividad de los niños.
Como todo en la vida cotidiana tiene sus más y sus menos. Las actividades extraescolares tienen varias ventajas: favorecen al contacto con sus iguales (sociabilizarse), les hacen convivir con niños diferentes y aprenden a integrarse y aceptan y aprenden a liderar grupos; por otro lado también tiene una serie de desventajas las cuales se centran en la palabra “sobreexigencia”: si todo el rato se piensa en la actividad se ve como una competencia la cual exige mucho más, que dejen de lado cosas más importantes como son los estudios por estas habilidades y pueden irritarse con más facilidad por la presión que sufren.
Para las actividades relacionadas con las artes se aconseja que la edad más correcta para iniciarlas sea la misma con la que el niño llega a la etapa primaria. Es decir más o menos alrededor de los 6 años es la mejor edad para comenzar con actividades relacionadas con la música y las pinturas.


Estas prácticas no deben de robarles horas de sueño, ya que están en una edad de desarrollo y crecimiento, y en tiempo que están durmiendo es cuando más crecen y el cerebro se va desarrollando. En esta etapa de su vida deben de dormir entre unas 10 y 12 horas.
Como es aparente con todo lo mencionado anteriormente la actividad extraescolar conviene que sean más bien lúdicas y no como las del horario escolar para que los niños puedan desconectar de la rutina diaria y no se sientan saturados con la escuela. Todo esto ayudara al niño tanto a crecer como persona como a desarrollarse tanto emocional como psicológicamente.